Quiénes somos
El Sentido de Nuestra Vocación
Sus miembros, religios@s o laic@s, independientemente de su estado
civil, vivimos en forma individual o en familia, según las necesidades de cada
un@, siguiendo unas Constituciones comunes que hacen que cada miembro se
convierta en un valioso instrumento para la construcción de nuestra Hermandad y
la vida de nuestra Iglesia.
Nuestras comunidades están conformadas y caracterizadas primordialmente
por un espíritu inclusivo y estamos abiertos a la diversidad que caracteriza al
mundo en el que estamos insert@s. Siguiendo la misma perspectiva de la Iglesia
de la que somos hij@s, incluimos en el seno de cada comunidad, a todas aquellas
personas de buena voluntad que sientan que Dios las llama a formar parte de
nuestra Hermandad, sin distinción en cuanto a raza, nacionalidad,
género, orientación sexual, condición social, profesión, estado civil, posición
política y cultura.
Estamos llamad@s a ser reflejo de Jesús, el Siervo de l@s sierv@s, en
cada una de las actividades en las que nos desarrollemos, tanto a nivel
individual como comunitario. Nuestra existencia encuentra plenitud de sentido,
entregándonos generosamente al servicio de l@s herman@s necesitad@s y de la
Iglesia. Encontramos primordial predilección por l@s excluid@s y olvidad@s, a
ejemplo de nuestro amado Maestro, Jesús de Nazaret.
+ Paz en Jesús Siervo +